Llegó la primavera y con ella, el final de los Open 2016. Cinco semanas duras y apasionantes en las que Dave Castro ha puesto a prueba no solo nuestro físico sino también nuestra mente y porque no, nuestro alma.
Comenzamos en la última semana de febrero, en una semana fría (al menos en mi tierra: Badajoz), con ilusión y ganas hasta que las mentes pensantes del HQ nos las echaron por tierra, como se suele decir “la primera en la frente”. Y es que el 16.1 los tenía bien puestos, un AMRAP eterno de veinte minutos con los temibles Lunges, los odiosos Burpees facing the Bar (en mi opinión la peor versión de este ejercicio) y los Chest-to-Bar Pull-ups. Si un WOD de veinte minutos ya es de por sí una tortura, súmale estos tres elementos y sí, la palabra que buscas es ¡¡¡HORRIBLE!!! Tanto fue así que solo había que ver las caras de Chyna Cho y Emily Abbott al terminar el ejercicio. Tendríais que haber visto la mía.
Las victorias a nivel mundial fueron para Josh Bridges y Emily Bridgers, con actuaciones impecables.
A este 16.1, le sucedieron unos días de paz y alegría, pensando que el siguiente WOD sería mucho más corto y accesible. “Pobres ilusos” estaría pensando la maquiavélica mente de Castro desde el garaje situado en la fría ciudad de Candler, regalándonos un WOD con un formato algo novedoso, pues mezclaba un AMRAP con EMON, obteniendo así cuatro intensos minutos para completar 25 Toes-to-Bar, 50 Double Unders y 15 Squats Cleans con 61 kg. De conseguir meter todas esas reps en los malditos cuatro minutos, conseguirías otros cuatro para volver a repetir el mismo ejercicio pero acabando con dos Squats Cleans menos pero con más peso. Así hasta completar un máximo de veinte minutos acabando con siete Squats Cleans de 140kg , una cifra al alcance de muy pocos.
Para la ocasión, el lugar elegido fue uno de los típicos Garage Gym de los inicios de este deporte y para los protagonistas a los actuales número tres y cuatro del mundo, Karl Gudmundsson y Dan Bailey respectivamente, que nos ofrecieron un espectáculo a la altura de las expectativas, llegando ambos hasta las últimas reps. A nivel mundial las victorias fueron para Sara Sigmundsdottir y Ben Smith.
Desde Milán, nos anunció Castro su nueva tortura en forma de 16.3. Esta vez parecía sencillo, un AMRAP cortito, de 7 minutos, con 10 Snatches de 75 libras, un peso más que asequible y 3 Bar Muscle-up. Y la verdad es que viendo a Shawn Ramírez y a Nick Paladino parecía aun más fácil. Pero no fue así, el trabajo de pizarra tras este WOD, estaba más que calculado, casi obligando a meter los sets de Snatches Unbroken si querías hacer un buen número de reps, desviándonos la atención hacia los Muscle-ups, para ocultar la fatiga y la enorme subida de pulsaciones que provoca el Snatch y más en su modalidad de Power o Muscle provocando que veas tu propio corazón latiendo tirado en el suelo, y después a ver quien es el guapo que se sube a la barra con los antebrazos tan grandes como cañerías. En resumidas cuentas, nos volvieron a tomar el pelo haciéndonos creer algo que no tenía nada que ver con la realidad. En la clasificación general los primeros puestos los coparon Sam Briggs y Devin Thaut.
Y por fin llegó el 16.4, en mi opinión el más interesante, ya que enfrentaba a la actual campeona, Katrin Davidsdottir y, bajo mi punto de vista, a la futura reina del Sport of Fitness, Sara Sigmunsdottir. Para tan especial ocasión, el director de los Games, nos tenía preparado un chipper de los de la vieja escuela, 55 pesos muertos, 55 Wall Balls, 55 calorías en el Concept 2 y los diabólicos HSPU. Ypor si eso fuera poco, con trece minutos para hacer las máximas repeticiones posibles. El duelo fue magnífico y pudimos ver a una Sara bestial, con un ritmo inhumano y a una Katrin intentando seguir ese ritmo, y digo intentando porque ni de lejos era capaz de seguir a la reina vikinga. Ejercicio bonito donde los haya y que seguro que a más de uno se les atragantó un poco, pero que la mayoría disfrutó. Cabe destacar que el evento no estuvo fuera de la polémica, ya que el comité de jueces tuvo bastante trabajo por la dudosa ejecución técnica de muchos altetas, entre ellos Josh Bridges que tuvo que sufrir una penalización de un 15% de sus reps por la mala ejecución de sus pesos muertos. Al final las victorias fueron para Rich Froning y Julie Abildgaard.
Alcanzando ya la última semana, y a sabiendas de quienes iban a ser los protagonistas del 16.5, empezaron las apuestas. Que si 1 rep max. de Clean&Jerk, que si de Snatch, que si Thrusters y Ring Dips… Pero si sois unos fanáticos de este deporte como un servidor, sabréis de la manía de Castro por repetir todos los años workouts de ediciones anteriores y si a eso le sumamos que los “simpáticos Thrusters” no habían hecho acto de presencia, solo había que rebuscar un poco. Así que si a todo lo anterior le sumamos una localización mítica como el Rancho, más los tres grandes exponentes de la especie “Homo Crossfiterensis”; Rich Froning, Mat Fraser y el campeón actual Ben “maravilla” Smith; pues el resultado de la ecuación es 16.5=14.5.
Sí, amigos. ¡Leéis bien! Había que volver a pasar por esta tortura de Thruster y Burpees facing the Bar en un For Time de 21-18-15-12-9-6-3. Mi primer pensamiento al verlo seguro que fue el mismo que el vuestro: “¿qué necesidad tengo de volver a pasar por esto?”. Un consejo, no busquéis una respuesta, no la tiene. El caso es que ganó Fraser con un tiempazo y haciendo alarde de un estado de forma espectacular, Froning en segundo lugar, el hombre tranquilo, como si no fuera con él y Smith ocupó el tercero, viéndosele un poco fatigado y lejos de sus dos contrincantes.
Las victorias generales fueron para Josh Bridges y Sam Bridgers. Tras los cinco eventos, los ganadores finales han sido Noah Ohlsen en la categoría masculina y Jamie Greene en la femenina. En fin, cinco semanas infartantes, cinco eventos, espero que los hayáis disfrutado tanto como yo. ¡Nos vemos en los Regionals!